El progresivo regreso a la “nueva normalidad” nos deja percibir un aire de cierta esperanza y confianza hacia el futuro. […]

El progresivo regreso a la “nueva normalidad” nos deja percibir un aire de cierta esperanza y confianza hacia el futuro. […]
Cada día es más frecuente que ante la frustración de que algo no nos ha salido bien, cedemos ante el impulso de ir a contarlo en nuestras redes sociales. Y en el proceso no revisamos qué estamos diciendo ni de quién, solamente buscamos el desahogo momentáneo de «vaciarnos» sin considerar los efectos negativos de difamar y dejar en mal a alguien más. Como si vaciar esa «basura digital» resolviera el conflicto original y, aún más importante, como si sumara o agregara valor a los demás.